Hemos vivido a lo largo de los últimos meses grandes emociones proporcionadas por la carrera a pie. Cientos de personas se han enganchado en este año 2014 a la práctica del running, y de ellas un porcentaje muy elevado han sido mujeres. Más de 40 carreras de carácter popular se han celebrado en la ciudad de Valencia, muchas de ellas solidarias. En los últimos días hasta una guardería, Patufet, se ha apuntado y en el barrio de Ruzafa corrieron más de 400 peques. No han faltado carreras muy especiales como la de la Cruz Roja, o la de los saharauis. También aquellas que tuvieron como marco la lucha contra el cáncer. No olvidamos la enorme labor de clubes y de todos y cada uno de los pueblos valencianos donde la carrera es algo más que una competición. Ahí está el circuito Divina Pastora, el de la Diputación de Valencia o todos los circuitos comarcales (La Ribera, La Marina, La Albufera, La Costera, Los Serranos, El Camp de Morvedre y muchos otros). Vamos a centrarnos en dos carreras excepcionales y que han proyectado el nombre de Valencia fuera de España. Dos carreras que están contribuyendo enormemente al desarrollo del turismo deportivo, en especial el procedente de otros países.

Deporte y turismo

Hace un par de semanas en Coimbra, la ciudad portuguesa que posee una de las universidades más antiguas de Europa, se celebró un congreso internacional dedicado al análisis del deporte y el turismo. Se presentaron ponencias y comunicaciones sumamente interesantes. Los países nórdicos mostraron cómo el deporte y el turismo pueden crear puestos de trabajo y mejorar la calidad de vida de miles de personas.

Estas naciones han enfocado las actividades deportivas dentro del marco de la salud y el bienestar, lo que ello llaman social welfare. Los resultados son excelentes. En los países escandinavos hay pruebas de esquí de fondo donde se llegan a reunir hasta 60.000 esquiadores, y al mismo tiempo han creado centros de recuperación y de esparcimiento en los que el agua desempeña un papel excepcional. En Noruega, Suecia, Finlandia e Islandia la práctica del ejercicio físico supera el 80% de la población. En España estamos en el 41 %, a años luz.

En Valencia el turismo deportivo se centra más en la organización de grandes eventos deportivos, en muchos casos auténticamente ruinosos. La deuda de la Generalitat Valenciana es monstruosa, y en parte debida a algunos de los grandes eventos deportivos celebrados en los últimos 5 años.

Afortunadamente la ciudad de Valencia cuenta con varios grandes acontecimientos deportivos rentables. Veamos dos de ellos: el medio maratón y el maratón Trinidad Alfonso. Otras ciudades como Santa Pola con su medio maratón o Castellón con su maratón también han logrado rentabilizar sus pruebas deportivas.

foto aerea tavernes

Carrera de Tavernes de la Valldigna, Foto: C.A.

Medio Maratón y Maratón Trinidad Alfonso

El Medio Maratón de Valencia y el Maratón, ambos patrocinados por la fundación Trinidad Alfonso, figuran entre los que más están haciendo por el turismo deportivo en Valencia. La Federación Internacional de Atletismo (IAAF) ha otorgado la etiqueta de plata (Road Race Silver Label) a estas dos carreras. Recordemos que para que obtener estas etiquetas hay que superar una serie de requisitos nada fáciles de alcanzar.

En este sentido la S.D. Correcaminos ha hecho una gran labor. Todo empezó con la ilusión de aquellos que quieren contagiar pasiones y ahora en las últimas tres ediciones del maratón los llegados a línea de meta han sido 7.781, 9.733 y 11.523. Cifras que muestran el crecimiento exponencial de la prueba. Otro dato a remarcar, la creciente presencia de la participación femenina. En cuanto a tiempos logrados ambas carreras alcanzan lugares excepcionales en el ranking mundial. Recordemos 2h07:14 de Félix Kipkemoi Keni en el 2013 y 2h27:01 de Azalech Maresha. Recordemos tres atletas por debajo de 59 minutos en la media en 2014. Una auténtica locura atlética.

La labor de los medios de comunicación ha sido decisiva para la consecución de esta etiqueta de plata. El programa Crono de Levante Televisión que dirige Xavi Blasco ha ayudado enormemente no solo a las carreras a pie sino al hecho de que el Maratón de Valencia haya alcanzado la etiqueta de plata pues uno de los requisitos es que la prueba sea retrasmitida por televisión. Los periódicos como el Levante o Super Deporte, las emisoras de radio, las revistas especializadas se han volcado con esta competición.

carrera del maratón de Valencia a su paso por el Luis Vives, Foto: Federico Fuertes

carrera del maratón de Valencia a su paso por el Luis Vives, Foto: Federico Fuertes

 Turismo deportivo e impacto económico y social

Los entendidos en el mundo de la carrera a pie saben que maratones como el de Berlín, Nueva York, Chicago, Londres, Bostón o Tokyo son referentes mundiales. Los organizadores de estas carreras elaboran estudios en los que valoran los impactos económicos y saben que muchos ciudadanos aprecian el valor añadido que ello supone, así como la marca de calidad para una ciudad.

El maratón Trinidad Alfonso y el 10K que se disputa en paralelo atrajeron a la ciudad de Valencia a más 11.000 atletas venido del fuera de la Comunidad, y la inmensa mayoría de ellos lo hicieron acompañados de sus correspondientes familias y amigos. Ciudades como Madrid, Barcelona, Albacete, Murcia, Alicante, Tarragona, Sevilla y otras aportaron centenares de corredores. Italia ocupó el primer puesto del ranking y a continuación todos los países del área francófona (Francia, Bélgica, Suiza). Añadamos a ellos británicos, alemanes, holandeses, marroquíes y portugueses, y comprenderemos el enorme peso que tiene esta carrera para el turismo en la ciudad. El impacto económico del Maratón en 2013 fue altamente positivo, el de la edición de 2014 lo será probablemente más.

Pero además de la economía hay más elementos que se pueden potenciar. Tenemos paisajes increíbles como la marjal o las montañas valencianas. Los puertos pesqueros y deportivos son de un gran encanto. Poseemos una pinacoteca excelente. Gozamos de u clima excepcional y de una gastronomía cada vez más apreciada. Contamos con una serie de balnearios que son auténticas enclaves para disfrutar de la vida y de la práctica del ejercicio físico. Pueden hacerse muchas cosas para que las personas que nos visitan conozcan un país del que nos tenemos que sentir contentos y para que nosotros mismos podamos gozar de una naturaleza tan propicia para la práctica del deporte.

Carrera de Alzira, Foto: Tony Gordo

Carrera de Alzira, Foto: Tony Gordo

Los errores cometidos

Valencia ha padecido aventuras desastrosas en el ámbito de la promoción deportiva y el turismo. Los millones de euros echados al horno (como diría el periodista Julio Camba) en las pruebas automovilísticas celebradas en la dársena del Puerto de Valencia son un perfecto ejemplo de lo que nunca debió llevarse a efecto. Desgraciadamente en este aspecto y en otros deportes (Hípica, Tenis, 2 ª edición de la Copa del América) los deseos de los políticos fueron decisivos en la programación de competiciones que no aportaron ningún plus a la ciudad, sino más bien todo lo contrario.

Además contamos con deportes de una gran belleza: la pelota valenciana, les corregudes de joies, las albuferencs pueden ser enormemente rentables desde todos los puntos de vista.

Si la sociedad valenciana y la española quieren evitar que el Titanic se hunda solo queda una solución: máxima trasparencia en cada una de las inversiones que la Administración realice. Si la clase política antepone su vanagloria personal, su deseo de perpetuarse en los cargos y llenarse los bolsillos lo más rápidamente posible, el final es el que ahora padecemos. Cada año, según Caritas, el número de pobres crece en la Comunitat Valenciana. Hoy vivir con 645 euros al mes, aquel que lo tiene, es un sueldo de pobreza.

El primer deporte en la franja de edad de 25 a 55 años

Ahora contamos con una ciudad donde la carrera a pie es su seña de identidad. Hace unos años salir a correr se decía que era cosa de unos pocos chiflados. Ahora el atletismo popular ocupa un lugar privilegiado y en la franja de edad comprendida entre los 28 y los 55 años de edad, es el deporte con mayor número de practicantes. Hoy muchos niños pequeños dicen: yo quiero ser corredor como mi papá, como mi mamá.

Por todo ello, por el camino andado, por las decenas de carreras preciosas con las que disfrutamos, las sansilvestres, los 10K, los 15K, las medias maratones, las carreras por la montaña, las carreras de orientación, las carreras escolares, las carreras a través del campo, las carreras en pista, las carreras en el Palacio Luis Puig, o en las pistas de atletismo, por la enorme afición que hay en todos y cada uno de los pueblos, por todo ello hay que sentirse satisfechos, pero no debemos olvidar que para que en las carreras el número de corredores crezca es necesario que las condiciones económicas de los valencianos mejoren.

El valenciano ya ha hecho suyo el maratón

En toda esta historia hay un personaje especial. El ciudadano valenciano. La asistencia de público en la pasada edición del Maratón fue enorme. Valencia está descubriendo el valor de la carrera a pie. Los bancos, las empresas, las grandes marcas comerciales y las autoridades por fin se han dado cuenta de la importancia social del fenómeno del running, y frente al deporte mercancía, que no es más que la continuación del panen et circense de los césares romanos, saben ahora valorar el deporte práctica.

La solidaridad, la amistad, el espíritu de superación personal, la ilusión por contagiar a tus amigos la práctica de algo tan gratificante como correr son las razones para creer en un futuro mejor, siempre y cuando la decencia, la honradez, la trasparencia y unas políticas basadas en servir a los ciudadanos sean las que se diseñen y ejecuten desde la Administración.

Grupo de Correcaminos, Foto: Correcaminos

Grupo de Correcaminos, Foto: Correcaminos